Hoy inicio esta aventura con una idea en mente, sin un mapa a seguir…

¿Qué me motiva?

Me mueven las ganas de acompañar a la gente que ve a las matemáticas como algo lejano, como una ciencia diseñada para que otros la entiendan. También las ganas de acompañar a la gente encargada de enseñarlas: profesores y papás. Quiero llegar al lado de todos ellos y decirles que entiendo por qué pueden sentirse así. Explicarles algunas de las circunstancias, muchas ajenas a ellos, que impiden que disfruten las matemáticas. Sin buscar culpables, encontrando soluciones.

¿Por dónde empezar?

Primero que nada, es importante saber que la gran mayoría de las personas tienen la capacidad de aprender matemáticas escolares, al menos hasta bachillerato. Son las situaciones que viven las que les facilitan, complican o impiden lograrlo.

Ahora se sabe que no hay tal cosa como un “cerebro matemático”, sólo cerebros bien o mal entrenados para hacer matemáticas. Para un desempeño suficientemente bueno en cualquier actividad, el talento natural que pueda tener alguien tiene menos influencia que el esfuerzo que le dedique a practicar, como afirma Carol Dweck en su libro Mindset. Si lo que se requiere es practicar lo suficiente, entonces todos podemos lograrlo. Siguiendo el entrenamiento adecuado y realizando un esfuerzo intencionado, esto es, hacer con el objetivo de aprender.

¿Qué quiero lograr?

Intentar diseñar un adiestramiento matemático único, “infalible”, no tiene sentido. Lo que yo creo que se necesita es tener una caja con herramientas pedagógico-matemáticas para emplear en cada situación la que se requiera. Busco ir llenando poco a poco la caja de herramientas personal de quienes lean estas líneas, para que las usen primero en su propio aprendizaje y después al acompañar a otros a aprender.

Confío en que estudiantes, profesores, papás y demás personas interesadas en mejorar su relación con las matemáticas encontrarán algo que les haga sentido en cada idea y estrategia que comparta, las cuales espero que se conviertan en semillas que den muchos frutos.

¿Sobre qué escribiré?

Las secciones que constituirán este blog serán dedicadas a las principales áreas de la matemática que una persona requerirá desde preescolar hasta bachillerato, incluyendo para cada tema alguna estrategia pedagógica y la explicación de por qué funcionaría y cómo aplicarla adecuadamente.

Algunas ideas saldrán de lo que he leído, dando mi propia interpretación, otras de lo que he vivido en los 17 años que llevo dedicada a la docencia y siendo mamá. Suelo decir que soy ingeniera industrial por profesión y profesora de matemáticas por vocación. He potenciado esa vocación estudiando una maestría y un doctorado en matemática educativa, este último en proceso en este momento, y leyendo todo lo que me parece interesante sobre pedagogía, matemáticas y la combinación de ambas. Hago investigación formal y también pruebo informalmente aquello que leo y me hace sentido o aquello que imagino que puede funcionar. Considero que se hace y publica mucha investigación en pedagogía de las matemáticas, pero los resultados de ésta no llegan de forma práctica a los docentes. También hay muchos recursos en la red, pero frecuentemente son propuestas de actividades para las cuales no se explica por qué funcionarían o no tienen un buen fundamento en su diseño, lo que complica que resulte efectivo su uso.

Busco hacer de este espacio un lugar donde se re-interpreten los resultados de las investigaciones como algo que el profesor pueda entender y aplicar; y se expliquen los “¿por qué?” de las cosas, en vez de imponer los “¿cómo?”. Sé que entender por qué hay ciertas estrategias que funcionan bajo ciertas circunstancias facilitará mucho el usarlas adecuadamente.

En resumen

Quiero impulsar una mejor pedagogía de las matemáticas, con la que se logren mejores aprendizajes. Quiero impulsar a las personas, mejorando su habilidad para hacer matemáticas, de forma que puedan acceder a un mejor futuro. Quiero impulsar a las matemáticas en el mundo, de forma que su reputación mejore y sean disfrutadas por más gente cada vez.

Antes de cerrar esta entrada quiero mencionar el significado que yo le doy al subtítulo:

Entender el ¿por qué sí? y el ¿cuándo sí? son el mejor ¿cómo? para aprender, enseñar y disfrutar tanto las matemáticas como cualquier otra cosa.

Cuando una persona entiende ¿por qué? un concepto tiene tal significado o ¿por qué? cierto procedimiento funciona, será capaz de emplearlos adecuadamente con mayor facilidad que si sólo aprende a repetirlo. Para que la comprensión del ¿por qué? sea completa, debe agregarse la comprensión del ¿cuándo? es válida esa interpretación del concepto y ¿cuándo? es válido ese procedimiento, a través de ejemplos y contra-ejemplos que abarquen la mayor cantidad de casos y aspectos posibles. Para mí esa es la mejor manera, o el mejor ¿cómo? aprender, enseñar y disfrutar las matemáticas.

Agradecimientos

Agradezco infinitamente a todas las personas que han influenciado mi forma de entender las matemáticas y la pedagogía: mi familia, mis maestros, mis alumnos, mis amigos, los autores de los libros que he leído, los expositores que he escuchado…

Este blog es parte de mi esfuerzo para que la combinación que he hecho en mi cabeza de todas sus enseñanzas beneficie a la mayor cantidad de personas posible.

Sinceramente,

Rebeca

PD1: ¿Saben? Aún no he logrado insertar en esta sección un botón que permita seguir el blog… lamento la molestia que implica ir a la página principal para hacerlo.

PD2: Quiero agradecer a estas dos páginas en las que me apoyo constantemente para redactar el blog: https://pixabay.com/   http://webresizer.com/