Esta es la entrada doble 406 y 407 de este blog. La semana pasada no me di tiempo para escribir y esta casi tampoco. Seré breve:
Muchos de los temas de matemáticas que se estudian de tercero de primaria en adelante requieren que se multipliquen números: divisiones, operaciones con fracciones, geometría, probabilidad y estadística, álgebra…
Muchos.
Entiendo el rechazo a la memorización sin sentido de datos que realmente no se van a usar después de una manera tal que no haya tiempo para buscarlos en internet; aunque de verdad creo que mientras más información tenemos guardada en la cabeza podemos ser más creativos uniendo dicha información de maneras inesperadas. No se puede unir lo que no existe.
También entiendo que hay gente que presume haber terminado la escuela sin saberse las tablas de multiplicar… aunque no explican cómo la terminaron ni qué tan bien aprendieron todo aquello para lo que era conveniente sabérselas o cuánta angustia sufrieron porque no les alcanzaba el tiempo para terminar de contestar un examen.
Escribo esto en medio de una pequeña frustración porque el grupo de niñas a las que apoyo no logra aprenderse las tablas. Ya intenté muchas ideas, pero las veo tan poco tiempo a la semana que noto que hace falta más frecuencia y constancia al aplicar dichas ideas para que funcionen.
Seguiré pensando en ideas. En la cima de la montaña, cuando todas las niñas se sepan todas las tablas, veremos un horizonte maravilloso lleno de oportunidades de aprender con más fluidez muchas cosas nuevas.
Comparto aquí algunas de las ideas sobre las que he escrito antes y que he estado probando (ver aquí).
¡Hasta el próximo miércoles!
PD: Quiero agradecer a esta página en la que me apoyo constantemente para redactar el blog: pixabay.
