Esta es la entrada 376 de este blog.
Cuando buscaba una imagen para encabezar la entrada de la semana pasada, empecé a divagar sobre la manera como se rebanan las pizzas comúnmente:
Una pizza para una persona se suele partir en 4 rebanaditas, todas para la misma persona.
Una pizza para dos personas se suele partir en 6 rebanadas, que equitativamente serían tres para cada una.
Una pizza para tres se suele partir (por facilidad en el trazo de los cortes) en ¡8! rebanadas… Y 8 no es divisible entre 3 (ver más sobre divisibilidad y divisores aquí y aquí), por lo que se complica repartir adecuadamente.
Una posibilidad para ello es que una de las personas coma menos que las otras dos: ella se come dos rebanadas, las otras dos personas se comen tres y todos contentos.
¿Y si quisieran todos comer lo mismo?
Una opción muy tardada sería partir cada rebanada en tres (la pizza completa quedaría partida en 24 rebanaditas) y que cada quién se comiera ocho de esas tiritas (8/24, que es una tercera parte).
Una opción un poco menos tardada es que cada uno se comiera dos rebanadas enteras y las dos restantes las partieran en tres, dos para cada uno. Entonces cada persona se comería 2/8 + 2/24, que vuelven a ser los 8/24 o una tercera parte.
Y otra opción que implicaría una plantilla de corte o mucha habilidad para cortar así sería rebanar la pizza en nueve rebanadas en vez de ocho, para que a cada quién le tocaran tres (3/9, que es una tercera parte).
Ah… se me ocurre otra opción: cortar solo 3 rebanadas enormes, poner cada una en un plato suficientemente grande y que cada quién decida como comérselas, si partirlas más pequeñas o malabarear para morder esa rebanadota.
Yo advertí que mi mente se había puesto a divagar al pensar en fracciones y en pizza… ¿Qué otras opciones se les ocurren a ustedes para rebanar adecuadamente una pizza?
Pueden ver lo que he escrito sobre fracciones aquí, aquí y aquí.
Hasta el próximo miércoles.
PD: Quiero agradecer a esta página en la que me apoyo constantemente para redactar el blog: pixabay.
